Junio debería ser un mes de reconocimiento y orgullo para quienes ejercen dos de las profesiones más esenciales en cualquier sociedad democrática: el periodismo y el derecho. En Venezuela, sin embargo, conmemoramos el Día del Periodista y el Día del Abogado en medio de una de las peores oleadas represivas del régimen de Nicolás Maduro, donde hoy ser periodista o abogado es también una sentencia.
Decir la verdad y luchar por la justicia se ha convertido en delito. Ejercer el derecho a informar o defender derechos humanos ha sido motivo suficiente para ser detenido, criminalizado o forzado al exilio. Hoy, más de 16 periodistas y 20 abogados están secuestrados por la dictadura, en procesos judiciales plagados de irregularidades, sin
garantías mínimas y, en muchos casos, sin siquiera acceso a sus familias.
Uno de esos nombres es Gabriel González, periodista que este 17 de junio cumplirá un año en prisión por el simple hecho de informar. También están Carlos Julio Rojas, Julio Balza, Carlos Marcano. Entre los abogados detenidos, figuran Perkins Rocha, María Oropeza, Henry Alviarez, Luis Tarbay y Rocío San Miguel, reconocida activista por los
derechos humanos.
La represión en Venezuela ha alcanzado un nivel donde ya no basta con perseguir a los políticos. Se persigue a quienes los defienden. Se encarcela a quienes cuentan lo que ocurre. Y se exilia a quienes se niegan a callar.
Como lo dijo el periodista Justo Navarro en nuestro programa más reciente: “Los criminales deben enfrentar la justicia e ir a la cárcel.”
Pero no son los criminales quienes están en la cárcel hoy en Venezuela. Son los abogados y los periodistas que los denuncian.
Sergio Contreras, abogado y ex preso político, lo expresó con claridad: “Cuando a veces hay cosas que nos quiebran la esperanza, ver a todos los que hoy están luchando por la libertad en Venezuela debe llenarnos de fuerzas para seguir ayudando al que sufre en una cárcel, al que está perseguido o al que lo perdió todo. La lucha y el trabajo arduo de los incansables hace que otros no se detengan, y a ellos nuestro reconocimiento.”
Ese es el espíritu de este mes de junio: no dejarnos quebrar. Reconocer el valor de quienes ejercen su vocación con coraje y ética, incluso cuando eso les cuesta su libertad. Levantar la voz por quienes no pueden hablar. Y exigir, con firmeza, que los organismos internacionales no sigan mirando hacia otro lado.
La comunidad internacional, las organizaciones defensoras de derechos humanos y todos los ciudadanos conscientes deben unirse para demandar la liberación inmediata de cada periodista y abogado detenido. No es un tema partidista ni ideológico: es una causa humana.
Este mes de junio rendimos homenaje a todos los periodistas y abogados que hoy están en prisión, en la clandestinidad o en el exilio. Ustedes representan la Venezuela decente que estamos decididos a recuperar. El país de la verdad y de la justicia no ha muerto, vive en cada uno de ustedes.
Xiomara Sierra es abogada con posgrado en política internacional, dirigente político.
IG: xiomarasierrad
X: @xiomarasierra