En su ensayo El fin de la paciencia (Anagrama), el activista climático y analista Xan López (43 años, Vigo, España) presenta una visión urgente y pragmática frente al desafío climático, articulada en una reciente entrevista con Clemente Álvarez en El País
1. Urgencia frente al bloqueo político
López describe nuestra situación como un “nudo temporal endiablado”: de un lado, la cuenta atrás para contener un cambio climático acelerado; del otro, un debilitamiento de los partidos de masas que históricamente impulsaban transformaciones.
En este escenario, considera inviable esperar a un colapso o transformación total del capitalismo: en apenas 5 o 6 años debemos reducir a la mitad las emisiones globales, y para 2050 alcanzar la neutralidad climática. Esa urgencia es incompatible con esperar a cambiar completamente el sistema
2. Un enfoque pragmático y experimental
En lugar de anhelar un cambio radical, López aboga por “intervenir en el capitalismo tal y como existe”, generando transformaciones drásticas dentro del sistema actual Sugiere adoptar un utopismo brutalmente pragmático, que busque oportunidades incluso dentro de crisis, y que establezca alianzas tácticas aunque imperfectas. Se trata de llegar a acuerdos operativos para avanzar con rapidez en medidas concretas
3. Más allá de las culpas simplistas
López critica las lecturas simplistas que apuntan a un pequeño grupo de empresas o a los súper ricos como únicos responsables:
- Los estudios que atribuyen el 71 % de emisiones a 100 empresas ignoran que muchas son petroleras estatales, donde el uso final del combustible es lo que más contamina
- El 20 % más rico del planeta emite un 70 % de los gases, y en los países occidentales casi toda la población forma parte de ese 20 %. Por tanto, la responsabilidad es colectiva.
4. Defensa del tecno-optimismo responsable
Para López, las energías renovables son un aliado fundamental y no meramente tecnológico, siempre que su implementación respete la justicia social y ecológica. No obstante, reconoce que hay impactos locales que deben ser gestionados con seriedad y consenso comunitario.
Este enfoque tecno-optimista se basa en la política industrial renovable en países como China y la disposición de gobiernos occidentales, surgida de una combinación de crisis económicas y políticas globales.
5. Recuperar la fuerza de la militancia
López señala que la fragilidad actual de la acción climática tiene raíces políticas profundas: una crisis de los partidos de masas, históricamente motores de cambio colectivo.
Pero su mensaje es claro: el activismo debe fortalecer la militancia política. Frente al escepticismo dominante—que asocia automáticamente “política” con corrupción—el ensayo es también una carta de amor a la implicación política.
Xan López invita a abandonar la espera de grandes rupturas ideológicas e insta a adoptar una estrategia basada en lo posible: actuar dentro del sistema, experimentar e implicarse. Su propuesta es clara: ante una crisis de tiempo, no hay otra salida que combinar urgencia climática con realismo político, apostando por la transformación inmediata más que por sueños a largo plazo.
Ambiente: Situación y retos es un espacio de El Nacional, coordinador por Pablo Kaplún Hirsz
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