
El Ministerio de Justicia de Argentina anunció el miércoles que tomará posesión y reutilizará un importante edificio dentro del sitio de memoria de la Escuela de Mecánica de la Armada.
La Escuela de Mecánica de la Armada fue un centro clandestino de detención durante la dictadura que gobernó Argentina entre 1976 y 1983. Se estima que aproximadamente 5.000 personas pasaron por la ESMA durante esos años; muchas fueron torturadas y asesinadas.
Después de la dictadura, la Escuela de Mecánica de la Armada se convirtió en museo y sitio de memoria histórica y también fue nombrada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Ahora, el gobierno del presidente Javier Milei anunció que, en línea con el nuevo Código Procesal Penal Federal que entrará en vigencia en Buenos Aires el 11 de agosto, “se puso a disposición de los fiscales federales un edificio de más de 5.000 metros cuadrados ubicado en la ex Escuela de Mecánica de la Armada”.
Según La Nueva Mañana, el edificio en cuestión es el "Casino de Oficiales", que actualmente alberga el museo de la ESMA. Se dice que el casino, también descrito como "Cuartel de Oficiales" en el sitio web de la ESMA, tenía dos funciones: ser un espacio de esparcimiento y descanso para los oficiales superiores de la Armada y un lugar de confinamiento para los detenidos desaparecidos.
El nuevo código penal busca reestructurar el sistema de justicia penal mediante medidas como la reducción de los plazos de los juicios y la concesión de mayores facultades a la fiscalía. Según el código, la fiscalía dirigirá las investigaciones y los procesos judiciales, mientras que los jueces serán responsables de supervisar los procedimientos judiciales y garantizar el cumplimiento de los derechos de los acusados.
El Ministerio de Justicia de Argentina afirmó que la Escuela de Mecánica de la Armada “anteriormente había sido utilizada para programas ideológicos y actividades político-partidistas”, pero ahora se utilizará “para fortalecer la infraestructura judicial y contribuir directamente a la lucha contra la inseguridad”.
“Nuestra decisión se enmarca en el mandato del presidente Javier Milei de eliminar gastos innecesarios, achicar el Estado y redirigir los recursos existentes hacia lo realmente importante: una justicia ágil, eficiente y al servicio de los argentinos”, agregó.
“Reafirmamos nuestro compromiso de proporcionar a los jueces y fiscales todas las herramientas necesarias para que puedan encarcelar a los criminales”, concluyó.

Escuela de Mecánica de la Armada, las críticas a la decisión
La decisión ha sido criticada por la diputada argentina Victoria Montenegro, cuyos padres fueron “desaparecidos” durante la dictadura.
Le dijo a Perfil que era "imposible" imaginar que los fiscales citaran a "personas privadas de libertad" a las instalaciones de la Escuela de Mecánica de la Armada. Continuó: "¿Se imaginan a alguien pensando en instalar una oficina dentro de un monumento al Holocausto donde traerían a personas encadenadas?"
Afirmó que el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, “no tiene autoridad para trasladar el Ministerio Público a la Escuela de Mecánica de la Armada”.
Montenegro también acusó al gobierno de “banalizar el mal” y de llevar a cabo un “ataque sistemático a todo lo relacionado con la política de derechos humanos en un sentido mucho más amplio”.
El Sindicato de Trabajadores Judiciales de la República Argentina (Sitraju) también criticó la decisión: «La función del sistema de justicia penal federal no es 'encarcelar a los delincuentes' ni 'combatir la inseguridad'. Su función es resolver los conflictos garantizando los derechos y garantías de nuestra Constitución Nacional».
«El Poder Judicial y el Ministerio Público deben ser independientes del Poder Ejecutivo. Este tipo de mensaje confunde los intereses gubernamentales con las funciones judiciales, en clara contradicción con el principio republicano de separación de poderes», agregó.
El anuncio sigue al cierre en enero de dos sitios de memoria histórica: la Biblioteca y Museo Haroldo Conti, dedicado al escritor desaparecido durante la dictadura, y el sitio de memoria Virrey Cevallos, un antiguo centro clandestino de detención.
En marzo, un juez bloqueó los planes de la Armada Argentina de destruir documentos que se pensaba que contenían información potencialmente vital sobre crímenes cometidos durante la dictadura.
En abril, el gobierno de Milei anunció que congelaría los fondos a la Escuela de Mecánica de la Armada durante 60 días, dejando según se informa a 176 trabajadores sin sus salarios de marzo.
Por Elizabeth Bratton en Argentina Reports, versión en castellano para El Nacional.