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El Cuarteto de Nos abrió todas las puertas

Por más de dos horas, la banda uruguaya hizo cantar, bailar y saltar a una fanaticada diversa en la que, desde los más niños hasta los más adultos, corearon todas las canciones. Como parte de su Puertas Tour, a propósito del último álbum publicado este 2025, los cinco músicos conmovieron a un público que acudió desde todas partes del país para disfrutar de un espectáculo marcado por los efectos visuales y especiales
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El Cuarteto de Nos se hizo desear en todo momento en el escenario de la Concha Acústica de Bello Monte este sábado 14 de junio. Durante dos horas la banda uruguaya conformada por Roberto Musso (voz y guitarra), Álvin Pintos (batería), Gustavo “El Topo” Antuña (guitarra), Santiago Marrero (bajo, coros y teclados) y Luis Angelero (guitarra) hizo un recorrido por sus temas más emblemáticos. Desde  los clásicos imperdibles que han marcado su discografía de 19 álbumes, pasando por algunas de las canciones de su gira en 2023 Tour Lámina Once y otras recién estrenadas este año en su último álbum, Puertas.

Niños, jóvenes y adultos de Caracas, Valencia, Barquisimeto y otros estados acudieron al llamado de El Cuarteto de Nos que, desde su fundación en 1980, ha ido sumando fieles fanáticos dispuestos a corear a todo volumen sus canciones sin importar el género o la edad. El inicio del concierto, bajo la producción de Ikaika Show, estaba programado, según la publicidad en las redes sociales, para las 7:00 pm. Sin embargo, al llegar, los miembros del protocolo de la productora Ikaika Show informaban a los interesados en preguntar que la banda iniciaría el espectáculo una hora después, a las 8:00 pm.

A los presentes no parece importarles tener que esperar. Hace un año y medio, en su visita en 2023, la banda llegó a Caracas bajo la producción de Cúsica. En esa oportunidad, a diferencia de este año, no se delimitó un espacio para los VIP, que pagaron 55 dólares, y los que compraron entradas generales en 40 dólares. Los controles de seguridad también se endurecieron con normas estrictas sobre el ingreso de botellas o paraguas. A los fanáticos no les importó desprenderse de sus pertenencias para ingresar en un recinto donde la espera fue parte de la experiencia, así como las ansias por disfrutar del show de más de dos horas que estaba planificado.

Cuando el baterista Álvin Pintos subió al escenario a probar sonido, se dieron las primeras exclamaciones eufóricas y esporádicas de emoción por parte de los presentes. Faltaban pocos minutos para las 8:00 pm y en la tarima se percibía movimiento. Gustavo Antuña también se acercó al micrófono para afinar su guitarra mientras los fanáticos preparaban sus celulares. Algunos buscaban entre una multitud de niños, jóvenes, adultos y hasta familias completas acercarse al escenario a toda costa para ver mejor.

El Cuarteto de Nos
"Cara de nada", la primera canción de la noche | Foto Ezequiel Carías @ezevisual

Al pasar las 8:00 pm los vítores de "Cuarteto, cuarteto, cuarteto" aumentaban. Mientras los músicos se preparaban en minutos que se hacían eternos para los presentes, "Ojitos lindos" de Bad Bunny sonaba de música de fondo. 10 minutos después, la música de fondo seguía sonando. El público esperaba... Las ansias aumentaban con cada minuto que pasaba. "Qué ya salgan", "se están tardando", "ya deberían haber salido", "me desespera esperar", comentaban algunos de los presentes.

La canción termina, las luces del escenario se apagan, en el público algunos levantan sus máscaras con el dibujo inexpresivo de una cara para hacer alusión a uno de los nuevos temas del álbum Puertas, "Cara de nada". Son precisamente esas caretas, rojas multicolores o amarillas, las que reciben a los músicos cuando todo queda a oscuras. Una leve luz ilumina la batería, los gritos de los fanáticos resultan atronadores. "Cuarteto, cuarteto, cuarteto", empezaban a exclamar, pero pronto se hizo silencio. Nadie quiere perder ni un segundo del show. Hay conversaciones, gritos y emoción. Los teléfonos son lo único que ilumina el escenario.

El Cuarteto de Nos
Público de todas las edades se reunió para cantar y hacer catarsis | Foto Ezequiel Carías @ezevisual

"Ahora sí", "están jugando con nuestros sentimientos", comentan algunos. En la tarima apenas se percibe movimiento, los gritos vuelven. Sin orden ni palabras, la euforia es arrasadora. Una puerta se proyecta en el fondo del escenario, esa que da imagen al nuevo álbum estrenado en mayo de este año. Roberto Musso se para en el centro. Los acordes comienzan a sonar y, con una careta neutra de color blanco, el fundador de la banda comienza a cantar “Cara de nada”. Al fondo, la imagen de la puerta se quiebra, efectos especiales con fuego sobre la tarima acompañan los versos de un tema que, a pesar de su poco tiempo de estreno, la letra es coreada por todos. Finalmente, la espera terminó.

Musso destacó el respeto y aprecio que le tienen a sus fanáticos | Foto Ezequiel Carías @ezevisual

El Cuarteto de Nos nunca decepciona

Una vez El Cuarteto de Nos comenzó a tocar, no hubo tiempo para las presentaciones o los saludos: dejaron que la música hablara por ellos. Apenas termina “Cara de nada”, la banda se gana una ovación, la primera de muchas, con el segundo tema de la noche, "El hijo de Hernández", del álbum Bipolar (2009). Cada canción está acompañada de efectos de luz y algunas cuentan con efectos especiales de humo o papelillos. En el público, todos bailan al son de la música y completan el coro cada vez que Musso lo pide.

"Ya no sé qué hacer conmigo", del álbum Raro (2006), es el próximo en el repertorio antes de continuar con “Lo malo de ser bueno" del álbum Porfiado (2012). No importa lo antiguo del álbum o qué tanto tiempo haya pasado desde el estreno de las canciones, todos los presentes se saben la letra y la cantan con emoción. Al terminar, Roberto Musso, finalmente, da unas palabras:  “Qué recibimiento nos están dando, tanto que no me dejan ni hablar. Antes que nada, es un placer para El Cuarteto de Nos estar en Caracas. Hay un montón de gente que se vino de otras partes de Venezuela, sabemos que es un viaje largo para ver al Cuarteto, el respeto y cariño es para ustedes. Vinimos de Costa Rica, nos vamos después para Colombia. Estamos presentando nuestro álbum Puertas, vamos a hacer unos cuantos estrenos”, señaló.

Los papelillos volaron por toda la Concha Acústica de Bello Monte | Foto Ezequiel Carías @ezevisual

Y en cuanto la ovación de los fanáticos se lo permite, añade: “Lo que acabo de decir no tiene nada que ver con la canción que viene, pero a mí no me mienten porque sé que esta noche de sábado muchos de ustedes no encontraron algo mejor que hacer". Así da inicio a "Algo mejor que hacer", también perteneciente al álbum Porfiado (2012). Al terminar, se hace una pequeña pausa antes de mostrar en el fondo de la tarima imágenes del gato negro característico del álbum Puertas. Musso se sienta un momento, y desde allí, canta los primeros versos de "El cuarto de Nico" una de las canciones más nuevas de la banda.

A pesar de su reciente estreno, el público canta el coro con saltos y baile. La canción termina. El gato negro del cuarto de Nico se desvanece poco a poco mientras algunos llaman al cantante desde el público. El repertorio continúa con "Fiesta en lo del Dr. Hermes" del álbum Lámina Once (2022), con Santiago Marrero cantando al frente. A Roberto Musso le lanzan una camisa en medio de la euforia que recibe con una sonrisa y un saludo.

El Cuarteto de Nos
Los efectos visuales fueron parte importante del espectáculo | Foto Ezequiel Carías @ezevisual

“¿Cómo la van pasando por acá? Aquí está divino, tan lindo está que ayer me acordaba de que estábamos almorzando y El Topo me dice: Roberto, hablando de termodinámica, si espero más rápido va a llegar antes lo que tiene que pasar. Yo le respondí: no sé si eso sea así pero vamos a hacer tiempo para que se haga más tarde”, contó. Inmediatamente después, los acordes de “Cómo pasa el tiempo” del álbum Habla tu espejo (2014) comienzan a sonar con un coro en el que los fanáticos marcaron los segundos del reloj con palmadas. Al terminar, las puertas de la proyección  se abren de nuevo en el fondo del escenario. Revelan un mundo submarino antes de cerrarse y volverse a abrir con la imagen de la canción "Ganaron los malos". Al cerrarse comienza el tema.

“No sabemos cómo agradecerles, primero a la gente que vino acá y a toda la gente de Venezuela. Los tenemos muy presente | Foto Ezequiel Carías @ezevisual

Los versos son uno de los más coreados por el público entre los efectos de fuego e imágenes proyectadas en tiempo real de los músicos. Sin introducciones ni palabras de por medio, suena después el solo de bajo de “Marioneta” de su penúltimo álbum Lámina once (2022). A medida que avanza la letra, el público hace gestos coreografiados siguiendo a Roberto Musso.Ha pasado una hora desde que empezó el concierto. Musso se limpia el sudor, sonríe y sigue. El público todavía quiere más.

El Cuarteto de Nos
El humo estuvo muy presente en el tema "El Perro de Alcibíades" | Foto Ezequiel Carías @ezevisual

De todas partes de Venezuela

Desde todas partes del país, fanáticos de El Cuarteto de Nos se reunieron en Bello Monte para disfrutar de un espectáculo del más alto nivel acompañado de opciones de comida y bebidas a precios accesibles.  Arepas, cócteles, cerveza, café expreso o hamburguesas fueron parte de la oferta en los diferentes toldos dispuestos en el recinto. Desde los 3 dólares las bebidas hasta hamburguesas entre 8 y 10 dólares o arepas en 4 dólares, muchos fanáticos hicieron colas largas para adquirir los productos mientras esperaban a que dieran las 8:00 pm.

Algunos incluso se acercaron al toldo de la Merch oficial para comprar camisas, suéteres o bolsos que iban desde los 30 dólares. Solo se aceptaban divisas en efectivo u otros métodos de pago internacionales como Zelle o tarjetas internacionales, pero eso no impidió que los fanáticos resolvieran para llevarse una prenda de recuerdo.

Gustavo "El Topo" Antuña | Foto Ezequiel Carías @ezevisual

Una vez inició el concierto, solo los vendedores con bandejas y camisas amarillas fosforescentes ofrecían agua y otras bebidas entre las canciones. Nadie quería perderse ni un momento del show en el que Roberto Musso incluso aprovechó para dar una pequeña clase de historia. “En el siglo V a.C, en Atenas había un gobernador que se llamaba Alcibíades. Dejen que les cuente la historia, hagámoslo más didáctico. Alcibíades, el gobernador, tenía un perro con una cola muy peluda, hasta que un día lo acusan de corrupción. Eso es algo que todos sabemos que pasa. Un día resulta que Alcibíades le corta la cola al perro. La gente empezó a decir: qué mal, es un maltratador. Un asesor le pregunta por qué. Y él dice: ¿ves? Ahora todo el mundo habla de la cola del perro y no de mí. La tradicional cortina de humo”, cuenta Musso.

“El perro de Alcibíades” fue el siguiente tema del repertorio con frecuentes efectos especiales de humo, luces e imágenes del video oficial proyectadas en la pantalla. Cada silencio entre canción y canción termina en ovación. Al terminar, Musso hace referencia a esa atmósfera vibrante y ensordecedora del público: “Esto no es un concierto, parece una especie de terapia grupal, una especie de catarsis psicológica colectiva. A mí me gusta resumir, yo diría que hoy no es más que un maldito fucking show”. Con la exclamación comienza “Maldito show” del álbum Lámina once.

El Cuarteto de Nos
Personas del interior del país acudieron al concierto | Foto Ezequiel Carías @ezevisual

Entre los versos, se proyectan imágenes con la letra del tema y en el solo de guitarra las serpentinas explotan y el guitarrista pasa al centro. Tras la euforia, al terminar, se hace una pausa antes de la próxima canción. “Contrapunto para Humano y Computadora", uno de los clásicos de la banda que cuenta con una voz automatizada mientras Roberto Musso se enfrenta a Katy, la computadora. El enfrentamiento termina. La imagen de una tetera rota con grietas doradas, parte de la portada del álbum Puertas, se proyecta al fondo y desde el público los niños más emocionados gritan el nombre de la canción que vendrá a continuación: “Esplín”.

El intro musical se extiende mientras los músicos regresan al escenario, acompañando la espera con imágenes del video oficial. Roberto Musso se sienta a esperar a que todos estén listos. Desde el lanzamiento de su último álbum, la banda ha tenido una fuerte presencia en las redes sociales con dinámicas en las que los fanáticos debían ver las imágenes y encontrar los objetos ocultos a simple vista. Mientras suenan los versos de uno de sus temas más recientes, el público canta con emoción.

El Cuarteto de Nos
Musso recibió las muestras de cariño con una sonrisa | Foto Ezequiel Carías @ezevisual

“Otra, otra, otra”

Hay un cambio de luz que acompaña el final de “Esplín”. Santiago Marrero comienza a tocar un solo de piano que da inicio a otro de los temas emblemas de la banda, “No llora".  Roberto Musso lanza un beso y hace un corazón con los dedos en los últimos versos. En el escenario hay una pausa de la música para limpiar los papelillos antes de empezar de nuevo. Musso toma la palabra: “Muchas, gracias queridos amigos. Me estaba tomando un vasito de agua porque además de las dos moscas me tragué algunos papelitos. Yo sé que hay gente con curiosidad que quiere saber quiénes somos, aunque ya son muchos años tocando”, dice.

Uno por uno, Musso presenta a los miembros de la banda hasta terminar con el baterista. “Yo creo que para ser baterista hay que amarse más que a nadie, así que en este día de San Valentín ficticio...”, comenta, y deja la frase en el aire para que el mensaje lo completen los primeros versos del tema “Me amo”. Al culminar, la imagen proyectada de las puertas se vuelven a abrir. El público enloquece ante las imágenes del video de la canción “Cinturón gris”. Musso solo hace una advertencia: abróchense los cinturones.

El público aguardó seis minutos para que les dieran más canciones | Foto Ezequiel Carías @ezevisual

El repertorio continúa con “Gaucho Power” antes de que Musso anuncie el momento menos esperado de la noche: la última canción.  “No sabemos cómo agradecerles, primero a la gente que vino acá y a toda la gente de Venezuela. Los tenemos muy presente, sobre todo la gente que tomó un avión, o estuvo varias horas en carretera. Que esto aquí sea el inicio de una visita mucho más seguida para todos ustedes. Acá está divino con el calor de ustedes. Los queremos mucho”, comenta. El show intenta cerrar con “Invierno del 92”, un tema que inicia justo después de que el vocalista anuncie los parámetros que hacen posible un concierto de El Cuarteto de Nos:

“Acá todos somos medio raros, todos somos bipolares, somos muy porfiados, vamos por la vida como zombies, llegamos a la casa y hablamos con nuestro espejo, nos gustan los jueves, en la lámina 11 solo vemos manchas y esta noche abrimos una puerta que nos hizo disfrutar”.

El Cuarteto de Nos en el cierre del concierto | Foto Ezequiel Carías @ezevisual

Al terminar la última canción de la noche, el público no se mueve. Nadie parece tener intención de irse. Se encienden las linternas, primero unas pocas, luego más y más. Los minutos pasan, nadie se mueve. Se gritan diversas cosas. “Otra, otra, otra”. “Cuarteto, Cuarteto, Cuarteto”. Luego de seis minutos de pausa, entre gritos y ovaciones, los fans lo consiguen: El Cuarteto de Nos vuelve al escenario.

“Miguel Gritar” y “Yendo a la casa de Damián” son los temas con los que se cierra el concierto. Musso abandona el escenario mientras “El Topo” Antuña y Marrero se lucen en sus habilidades con solos de guitarra y bajo que, entre luces y muchos efectos visuales de humo, mantienen en vilo a cada uno de los presentes, felices y satisfechos. Niños, jóvenes y adultos, todos reciben por igual el adiós definitivo de cada uno de los miembros de la banda. Algunos lucen sus pancartas, otros ondean la bandera de Uruguay, los más pequeños se suben a los hombros de sus padres para ver mejor. No hay edad para ser fanático del Cuarteto de Nos.

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