
El primer panel del VI Encuentro Ciudadano, que forma parte de la Cumbre de expresidentes iberoamericanos contó con la participación de cuatro exjefes de gobierno: Andrés Pastrana, de Colombia; José María Aznar, de España; Felipe Calderón, de México; y Mauricio Macri, de Argentina.
Los exmandatarios defendieron con firmeza la participación política, instando a las personas capaces y adineradas a no retirarse de la vida pública. Criticaron las soluciones fáciles que ofrecen los populismos de izquierda y derecha —aunque sus ejemplos prácticos se inclinaban más hacia la izquierda.
José María Aznar, expresidente del gobierno español (1996-2004), comenzó expresando gran orgullo por sus numerosas raíces asturianas. Inmediatamente después, se lanzó a una reivindicación de la política, argumentando que las crisis que existen son fundamentalmente políticas y solo se resolverán con políticas diferentes y la incorporación de nuevas personas.
Andrés Pastrana , durante su intervención, lamentó que «solo el 6,6% de la población mundial vive en democracias plenas». El político colombiano describió «una crisis política», cuyo mejor ejemplo es la «falta de confianza en la democracia, que se encuentra en su punto más bajo». Como alternativa, señaló, «nos enfrentamos a la tendencia global al surgimiento de líderes autoritarios».
Mientras, Felipe Calderón, presidente de México entre 2006 y 2012, definió el populismo como «una estrategia de poder, sin importar si es de izquierda o de derecha, donde manipulo tu ansiedad, tu ira y tu frustración para dominarte en tu nombre».
El evento, en el que participaron seis expresidentes de Iberoamérica y el español José María Aznar, estuvo concebido como un foro para reflexionar sobre el estado actual de la democracia y la libertad, identificando amenazas y buscando soluciones a través del diálogo y la cooperación entre diferentes perspectivas ideológicas.