El entrenador venezolano Manuel Rangel fue hallado sin vida tras presuntamente lanzarse al río East River, en el distrito neoyorquino de Brooklyn, en Estados Unidos.
Rangel había sido reportado como desaparecido el 1 de mayo, luego de asistir a una fiesta en East Williamsburg, según reportaron medios locales.
Su pareja, Shakti Castro, informó a las autoridades que, al salir del evento, él se dirigió hacia Domino Park y, según su relato, se habría arrojado al East River, una corriente conocida por sus aguas rápidas y fondo rocoso, lo que representa un alto riesgo para cualquier persona que caiga al río.
El Departamento de Policía de Nueva York activó un operativo de búsqueda que incluyó unidades acuáticas, drones y buzos. El cuerpo del entrenador venezolano fue localizado 15 días después del inicio del despliegue.
Rangel era originario del estado Trujillo, Venezuela, y vivía en Nueva York desde 2016. Además de su trabajo como entrenador también era nutricionista.
Venezolano en Texas murió por una bala perdida mientras dormía
Gabriel Golindano, migrante venezolano de 31 años de edad, murió mientras dormía junto a su pareja en su apartamento en Dallas, Texas, por una bala perdida que atravesó el techo de su vivienda. La tragedia ocurrió el 8 de mayo en la madrugada.
El joven, de Maturín, estado Monagas, llevaba solo medio año en Estados Unidos. Había migrado con su pareja en busca de tranquilidad y un nuevo comienzo, publicó Univision. Ambos vivían en West Oak Cliff, al oeste de la ciudad, y trabajaban para mantenerse mientras esperaban una audiencia migratoria.
Esa madrugada, como tantas otras, cenaron, vieron una película y se fueron a dormir. Minutos después de las 2:00 de la madrugada, una ráfaga de disparos interrumpió la calma. Joana, su pareja, despertó sobresaltada, y Gabriel, que siempre reaccionaba primero ante cualquier ruido, no respondió. Cuando lo tocó, estaba cubierto de sangre.
"Me asusté. Empecé a llamarlo porque siempre que pasaba algo, él era el primero que se levantaba. Pero esta vez no respondía. Lo moví y ya estaba lleno de sangre", contó la joven a Univision.
La policía de Dallas informó que los disparos iban dirigidos a un apartamento del primer piso, pero varias balas atravesaron paredes y techos. Una de ellas alcanzó a Gabriel, que dormía en el apartamento de arriba.
