Diosdado dijo: “Si le pasa algo a Chespirito (refiriéndose a Edmundo), ella asume, porque ella es vicepresidenta, te di una buena idea”.
Diosdado es el actual secretario general del PSUV, partido que es gobierno y dictadura; es un hombre que desde muy joven y gracias a Chávez ha ocupado distintos cargos políticos: ministro, diputado, gobernador y como vicepresidente asumió la presidencia brevemente el 13 de abril, conoce del asunto y las trampas.
Por su cercanía a Chávez siempre fue adulado por los mismos chavistas y opositores; esa adulación es lo que hace a Diosdado actualmente tan prepotente, déspota y arbitrario con su entorno.
Su idea a María Corina viene reflexionada por alguien que está curtido en el poder y la política, incluso en la imposición de realidades políticas; él sabe que es la forma como ellos lo abordarían.
Es una aceptación implícita del asunto por ser él quien lo propone. María Corina debería considerar esto muy seriamente. No veo a Diosdado declarando que su programa, el que obliga a los militares a ver, es solo un circo y él un payaso que dijo eso como un chiste, y que con trucos y mañas el mazo sí engaña.
El pueblo venezolano escogió con votos al doctor Edmundo González Urrutia como presidente y todos esperamos que siga firme en la lucha y que Dios le dé vida, salud para que pueda asumir la presidencia y como él dijo, ser recordado como el presidente que unió a los venezolanos. Edmundo negoció su salida del país y presenta un estado de salud en observación permanente.
María Corina es la líder de la oposición, escogida en unas primarias por el pueblo venezolano, no la dejaron participar en las presidenciales por ser un riesgo para el régimen de Maduro.
Para muchos venezolanos la lucha política actual es entre María Corina con su pueblo civil contra un Cabello y sus esbirros; sobre todo luego de quedar claro que Maduro no tiene apoyo popular.
Luego de la detención del yerno del doctor Edmundo, se ha visto más bajo perfil, el régimen lo presiona; esperemos que no ceda, pero en la realpolitik debe ser consciente de que el voto venezolano es de María Corina, y eso da representación y poder político.
La situación de Diosdado no es fácil. Comencemos por lo más delicado: su hija está sancionada y las acciones que está realizando actualmente son violatorias de esas sanciones. Daniela puede ser detenida en cualquier país aliado de Estados Unidos y enviarla allá, no me extrañaría que las empresas que estén registrándose en la institución dirigida por la joven sufran consecuencias por ello. El otro gran problema es su juicio con recompensa incluida, no es fácil ser investigado por los americanos, ellos saben tus números, correos, con quién te reúnes, qué haces u ordenas, todo.
Como si fuese poco, Diosdado debe luchar contra los Rodríguez que lo quieren fuera y débil; Jorge, Delcy y Héctor, con ayuda de Maduro asumen con habilidad la dirección política, recientemente sabotearon y se impusieron en la designación de los candidatos a gobernadores; aprovecharon que Freddy Bernal en apoyo a Cabello llegó tarde a la reunión del partido; Diosdado tenía en Monagas al secretario general de los Tupamaros, Williams Benavides y lo sacaron; para Guárico tenía al general Ovidio Jesús Delgado y se lo cambiaron; otra demostración es que varios de los partidos del polo patriótico son financiados desde Pdvsa, pero por orden de Delcy los que están con Diosdado son marginados para las asignaciones, también negado cualquier contrato para los jefes de esos partidos.
Así se ría en público e intente ocultarlo, él sabe que lo quieren fuera y sin poder. Esa jugada de darle a Cabello lo militar y represivo para llenarlo de delitos de violación de los derechos humanos y ellos manejar lo político-diplomático al final termina prevaleciendo quien tiene poder civil; Jorge Rodríguez ha sido señalado de llegar al TSJ con gritos, insultos y vulgaridades a los magistrados, así es su trato.
La mejor opción para Diosdado es que expulse a Maduro y dirija la transición, negocie su situación con Estados Unidos y sea una especie de Frederik Willem de Klerk.
La embarcación capturada con droga de verdad y real frente a Puerto Cabello tumba la narrativa en la supuesta lucha dudosa contra las drogas de Diosdado; Puerto Cabello está en el centro del país y pertenece al estado Carabobo, dirigido por Rafael Lacava, hombre de Maduro y pudiera estar en esa jugada; tanto el tema de la droga en pleno centro norte del país, así como los funcionarios robándose las pantaletas de Magalli Meda, repercute en la imagen de Cabello.
La actividad del 25 de mayo tiene entre sus muchas finalidades dos en específico; la primera, impulsar a Capriles como vocero de la oposición internacionalmente, intentando aprovechar sus contactos, cosa difícil por el posicionamiento fuerte que tiene María Corina con Rubio, Trump, el hijo de Trump y todos los senadores.
Segundo, Maduro intenta recuperar el poder político perdido el 28J, que hoy tiene Diosdado, recordando que luego de dirigir el fraude, la represión y ser "dueño" del Seniat, quedó como el presidente de facto del país; Maduro solo es un candidato perdedor, pésimo diplomático y negociador que prometió agenda cero con Trump; Diosdado le salvo el cargo por ahora.
La estrategia de Maduro contra Cabello se puede comparar a la utilizada por el general Charles de Gaulle en su momento para recuperar el control político.
De Gaulle tenía cansado a los líderes aliados y estos llevaron a Argelia un posible rival para su liderazgo, el general Henri Giraud, un veterano de la Primera Guerra Mundial.
Giraud representaba la aspiración de la redención de la Francia de Vichy; Roosevelt y Churchill propusieron un duunvirato (dos personas comparten el poder) a los dos generales, pero De Gaulle se negó, alegando que él era quien representaba genuinamente a Francia.
Henri Giraud no tenía tanto talento en la política. A pesar de tener el apoyo de los líderes aliados en ese momento, desperdició ese potencial tan grande en poco tiempo. De Gaulle propuso aceptar un liderazgo conjunto a través de un comité formado por los dos: De Gaulle como jefe del departamento político y Giraud como jefe de la fuerza armada.
Al poco tiempo de comenzar con esa metodología y como era predecible el poder militar de Giraud terminaría sometido por el poder civil político. De Gaulle con el poder político supervisaba las operaciones militares de Giraud, quedando este con el mismo estatus subordinado del resto del personal.
De Gaulle describiría: “Era pues, inevitablemente que Giraud se encontrara cada vez más aislado y rechazado, hasta el día en que, cercado por unas limitaciones que no aceptaba y, además, privado de apoyo externo, decidiera dimitir”.
No bebiera sentir pena alguna por Cabello por su rol de violador de derechos humanos y por su falta de habilidad política en comparación con Maduro y los Rodríguez, que están desesperados por retomar el control perdido el 28J, pero Jorge es solo un oportunista. Chávez nunca lo necesitó para ganar electoralmente.
Diosdado tiene un grupo político y de militares que dependen de él y si ya están desplazados por Maduro y los Rodríguez, podemos imaginarlo aislado en unos años, producto de las acciones calculadas y despiadadas en su contra que le quiten acceso a la autoridad, muchos más luego de que transformen el poder político exclusivamente para el dominio de Nicolás.