El papa Francisco fue el primer obispo de Roma en hablar directamente sobre el cambio climático y advirtió de las consecuencias para el planeta. Será recordado como una figura clave para el movimiento ambientalista.
El pontífice, cuyo nombre secular era Jorge Bergoglio, falleció el lunes 21 de abril a los 88 años, tras un papado de 12 años en el que marcó la historia con la primera encíclica verde de la que se tiene registro: Laudato si.
Laudato si (Alabado seas, en español), la segunda encíclica de Francisco publicada en 2015, se ha posicionado como uno de los documentos que perfila el legado verde de su pontificado, que se extendió mucho más allá de los muros del Vaticano, y que lo llevó incluso a querer participar en la cumbre de la Organización de Naciones Unidas sobre el cambio climático en Dubai o COP28, pero su estado de salud se lo impidió.
Sin embargo, esto no impidió que advirtiera ─inicialmente a través de Laudato si─ sobre la necesidad de hacer cambios profundos en los estilos de vida, modelos de producción y consumo; así como limitar al máximo el uso de recursos no renovables, moderar el consumo, reutilizar y reciclar; atender a los migrantes que huyen de la degradación ambiental, y criticar abiertamente la privatización al acceso al agua.
De hecho, la organización Sachamama y EFE Verde lo nombraron por dos años consecutivos como uno de los 100 Latinos más Comprometidos con la Acción Climática, con el que la ONG y la agencia de noticias reconocen cada año a los hispanos que más luchan contra el cambio climático.
“El papa Francisco, a través de su encíclica Laudato si, ha promovido la concienciación sobre el cuidado de nuestra 'casa común', el planeta, advirtiendo de los graves problemas de la crisis medioambiental y responsabilizando al sistema económico mundial de llevar a la humanidad al borde del colapso por su falta de fundamento ético. En su opinión, la codicia del capitalismo de mercado y el 'dios dinero' también están llevando a la humanidad a la contaminación del alma humana y a la corrosión de su espíritu”, es el texto con el que Sachamama y EFE reconocieron su activismo.
El Papa también animó a los cristianos a “ser protectores de la obra de Dios” porque “es parte esencial de una existencia virtuosa”.
Los mensajes del papa Francisco sobre el cambio climático
Francisco fue directo al expresar que consideraba un fracaso las cumbres mundiales sobre el medio ambiente, en las que, a su juicio, se priorizaban los intereses políticos y económicos sobre el bien común. Sin embargo, aun así participó en una videoconferencia de la COP28 y reclamó unión y acción de la humanidad para frenar el cambio climático.
También exhortó a las religiones a trabajar juntas para dar ejemplo. "Demos ejemplo, como representantes religiosos, para mostrar que un cambio es posible, para manifestar estilos de vida respetuosos y sostenibles y pidamos encarecidamente a los responsables de las naciones que la casa común sea preservada", aseveró el pontífice, de acuerdo con una reseña de EFE Verde.
En su exhortación apostólica Laudate Deum (octubre de 2023), que continuó a Laudato si, el Papa afirmó que el mundo se desmoronaba y se acercaba a un punto de no retorno. Criticó severamente a una política incapaz de afrontar la crisis medioambiental debido a intereses de poder y económicos.
Aseguró que en los ocho años transcurridos entre ambos textos no hubo suficientes reacciones.
Laudate Deum abordó el impacto creciente del cambio climático en las vidas y familias, así como sus efectos en la salud, el trabajo, el acceso a recursos, la vivienda y las migraciones forzadas.
En enero recibió un Papamóvil, marca Mercedes Benz, que utilizaba electricidad. Fue el primer vehículo oficial de la santa sede con esa tecnología.
El rol del papa Francisco en el mundo contra el cambio climático
La influencia del líder católico también la resaltó el secretario ejecutivo de la ONU para el cambio climático, Simon Stiell, quien dijo que el pontífice fue “una figura destacada de la dignidad humana y un inquebrantable defensor de la acción climática”.
Stiell destacó que Francisco conocía profundamente los complejos problemas climáticos y que su liderazgo unió las fuerzas más poderosas de la ciencia y la espiritualidad para transmitir verdades irrefutables sobre la crisis del cambio climático.
“A través de su incansable lucha, el papa Francisco nos recordó que no puede haber prosperidad compartida hasta que hagamos las paces con la naturaleza y protejamos a los más vulnerables, ya que la contaminación y la destrucción ambiental llevan a nuestro planeta al borde del colapso”, añadió Stiell citado por la agencia de noticias EFE.
Por: Huella Zero.
