
El ensayista peruano Álvaro Vargas Llosa declaró este lunes en Lima que el fallecimiento de su padre, Mario Vargas Llosa, a los 89 años de edad, representa para Perú la pérdida de "uno de sus mejores hombres".
"No tengo otra cosa que decir que el Perú ha perdido a uno de sus mejores hombres y nosotros a un ser infinitamente querido a quien vamos a echar de menos", dijo Álvaro Vargas Llosa en la entrada del edificio donde residía su padre, que murió el domingo, y donde hoy están velando su cuerpo en la más estricta intimidad.
El primogénito del Premio Nobel de Literatura de 2010 solicitó a los medios y a los ciudadanos presentes en el lugar que respetaran la privacidad de la despedida de su padre, quien había expresado su deseo de no tener ceremonias póstumas, reseñó Efe.
"Hemos decidido llevar este duelo en la intimidad, velando a mi padre en casa en lugar de un lugar público", explicó. Por ello rogó a los medios "que respeten esa privacidad", anticipando que evitarían futuras declaraciones, más allá de las ofrecidas este lunes en señal de respeto hacia los medios, el público y quienes habían enviado mensajes de afecto.
Añadió que les "queda el consuelo no solo del extraordinario padre que fue, sino del hermoso legado que deja a Perú y al mundo".
Agradeció las numerosas muestras de afecto y pésame recibidas desde Latinoamérica, Estados Unidos, Asia y Europa, tanto de individuos como de instituciones, organizaciones y gobiernos, extendiendo su gratitud y la de su familia, incluyendo a su madre Patricia y sus hermanos Gonzalo y Morgana.